Galería: Sara Montiel antes de casi todo.

Hace poco más de dos meses que Sara Montiel ha añadido a su rango de estrella, de diva, de actriz universal, la categoría de “octogenaria” y, quizá para celebrarlo, ha anunciado el inicio de una gira con un nuevo espectáculo. De la actriz manchega, que, con toda la controversia que se quiera, ha habitado la conciencia colectiva de la sociedad española a lo largo de seis décadas, es muy difícil decir casi nada, toda vez que de su figura y su obra todas las generaciones vivas del país tienen una idea formada. Quizá, mejor que tratar de trazar una semblanza de sus muchos méritos, de sus logros y de sus fracasos, sea más conveniente e ilustrativo, invitar a la reflexión desde la contemplación de su imagen, cuando todo estaba por venir en su carrera, cuando estaba muy lejos de formarse el mito que habría de encarnar, cuando frente el objetivo de la cámara tan sólo podía exhibir su pujante juventud, desnuda y neta.

Así, en las páginas de un ejemplar de la revista cinematográfica que dirigía Tono, del “Cámara” número 72 , de fecha 1 de enero de 1946, encontramos a una adolescente que, hollando el umbral de la picardía, nos muestra, sonriente, las rodillas. Una muchacha que se encontraba inmersa en una cinematografía imposible, disparatada, que se desarrollaba en un país herido de muerte que utilizaba la magia del cine para ofrecer espectáculos tan delirantes como la película del fotograma que acompaña estas líneas, “El misterioso viajero del clipper” (Gonzalo Delgrás, 1945). Adaptación a la pantalla de la novela “Napoleón llegó en el clipper”, de la escritora Luisa María de Linares, que tan en boga estaba por aquel entonces como hoy olvidada. En la imagen, la belleza de la jovencísima María Antonia Abad Fernández (nombre real de Sara montiel), algo enmascarada por el tinte rubio con el que desvirtúa el color original de sus guedejas, aparece cruel y estruendosamente contrastada con la “peculiar” apariencia de la actriz y guionista Margarita Robles, esposa, por más señas, del director de la película.